viernes, diciembre 26, 2008

Llega y alborota mis planes.
Los invierte, los pone de pies a cabeza. Acaricio el cesped con mis manos y rozo el cielo con mis pies...
Y yo, esclava a las palabras que noches pasadas me sirvieron de abrigo, gozo de ese alboroto, y me siento dichosa por donde lo pienso.
El verano tiene su olor, los tilos su perfume, las estrellas su rostro.. Hasta el mar, con su rugido me recuerda a él, su fuerza, su bravura. El verano siempre lo trae a mi, aunque sea a través del viento...
El verano destruye el tiempo y los relojes. Y mi ilusión que durante mucho tiempo pendió de un hilo y no dejó que la tiraran por la cuerda floja, hoy baila la danza del fuego y rechina sus dientes de alegría.
No existen esperas cuando detrás del horizonte está él, sentado... jugando a la ironía hasta con su sombra. No existen los minutos, sino los instantes...

Eterna, eternísima Amélie

Creen que lo digo todo, que me juego la vida.... Porque no te conocen, ni te sienten...
Silvio Rodriguez ~

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